martes, 25 de febrero de 2014

Derechos humanos abatidos en protestas venezolanas

Por Humberto Márquez

Concentración opositora el último fin de semana en Caracas. Crédito: Cortesía MUD
Concentración opositora el último fin de semana en Caracas. Crédito: Cortesía MUD

CARACAS, 24 feb 2014 (IPS)  Trece muertos, decenas de heridos, unos 500 detenidos, denuncias de tortura, de represión ilegal de fuerzas de seguridad y grupos irregulares y de agresiones a la prensa, marcan las dos semanas de confrontación política en las calles de más de 30 ciudades de Venezuela.

El Estado “ha tirado a la basura los principios básicos de (la Organización de las) Naciones Unidas sobre uso de la fuerza y de armas de fuego (aprobados en La Habana en 1990), con el desdén de sus órganos controladores, como la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo”, dijo a IPS el coordinador de la organización humanitaria Provea, Marino Alvarado.

Según testimonios, investigaciones de prensa y vídeos que circulan en las redes sociales, varios manifestantes murieron por disparos de policías vestidos de civil, de grupos violentos que interceptaron manifestaciones, o por descargas de perdigones supuestamente lanzadas por efectivos de la militarizada Guardia Nacional Bolivariana.

Uno de los últimos, este lunes 24 por la mañana, fue Jimmy Vargas, de 34 años, quien cayó del segundo piso de un edificio atacado supuestamente por efectivos de la Guardia Nacional con perdigones y bombas lacrimógenas en San Cristóbal, capital del estado de Táchira, en el sudoeste andino fronterizo con Colombia.

El domingo murió un ingeniero de sistemas, Alejandro Márquez, víctima de una golpiza propinada presuntamente por guardias nacionales cuando registraba con su teléfono móvil incidentes junto a una barricada en una zona céntrica de Caracas.

Entre los muertos se cuentan también víctimas del vandalismo de grupos de manifestantes.

El viernes 21 falleció el trabajador de un supermercado Elvis Durán, de 29 años, cuando regresaba a su casa conduciendo una motocicleta y chocó con un cable de alambre colocado al parecer por opositores a la entrada de la calle donde residía.

En Valencia, urbe industrial al oeste de Caracas, se denunció entre jóvenes torturados que a uno de ellos, Juan Carrasco, le introdujeron el cañón de un fusil en el recto. “Mi hijo fue vejado, violado, humillado por los de uniforme verde. Le destrozaron la vida a él y a otros muchachos”, deploró su madre, Rebeca González de Carrasco.

La joven Geraldine Moreno Orozco murió por perdigones disparados a quemarropa en su rostro, después de que ya estaba derribada por una primera andanada.

En varias ciudades hubo denuncias de que a jóvenes detenidos los rociaron con gasolina y amenazaron con quemarlos, o que fueron torturados con bastones eléctricos. Las denuncias también se refieren a agentes de seguridad arrojando bombas lacrimógenas dentro de viviendas.

Los primeros manifestantes abatidos, al cabo de una marcha en Caracas el día 12, cayeron en una balacera en la que actuaron efectivos del Servicio Bolivariano de Inteligencia (policía política) que desobedecieron una orden de acuartelamiento, según el presidente Nicolás Maduro.

De acuerdo al mandatario, 30 personas han muerto porque las “guarimbas” (refugios resultantes de las barricadas) les han impedido recibir atención médica oportuna.

Entidades de juristas, como el Foro Penal Venezolano y la Fundación para los Derechos y la Equidad, acopian denuncias para presentar a instancias internacionales. “Responsables del gobierno pueden ser acusados por delitos de lesa humanidad”, dijo a IPS la abogada Elenis Rodríguez.

La ola de manifestaciones se inició el 6 de febrero en la capital de Táchira con estudiantes que protestaban contra la delincuencia, pues en su universidad una alumna estuvo a punto de ser violada por asaltantes.

La protesta fue disuelta y dio origen a una mayor, contra la represión, en la que algunos exaltados arrojaron piedras a la residencia del gobernador de la región, José Vielma, militar retirado e integrante del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

A tres jóvenes aprehendidos se les abrió juicio y se los envió a una prisión en la noroccidental ciudad de Coro. Las protestas estudiantiles se extendieron entonces como reguero de pólvora a otras ciudades en demanda de su libertad, y en los Andes fueron acompañadas por miles de vecinos, en solidaridad.

El 12 de febrero, Día de la Juventud en Venezuela y fecha del bicentenario de una batalla de la guerra de independencia, movimientos estudiantiles prepararon marchas en todo el país, y un sector crítico de la coalición opositora Mesa de Unidad Democrática, encabezado por el dirigente Leopoldo López, llamó a reclamar “la salida” del gobierno de Maduro.

Se produjeron grandes movilizaciones, encabezadas por jóvenes y sectores de clase media cuyo sustrato, coinciden analistas políticos, es el descontento por las erráticas políticas del gobierno ante la escasez de productos básicos, la inflación y el auge de la criminalidad.

Aunque el grueso de las demostraciones son pacíficas, algunas se acompañan de pedreas, improvisación de barricadas con desechos a los que se prende fuego en calles y avenidas y otros actos vandálicos.

El gobierno ordenó arrestar al dirigente opositor López, del pequeño partido centroderechista Voluntad Popular, acusándolo de instigar los desórdenes al llamar a propiciar “La Salida”, mediante la toma de las calles, y este se entregó a la cabeza de una multitudinaria concentración en Caracas.

Mientras, al estado de Táchira se enviaron aviones de combate y helicópteros militares que sobrevolaron las manifestaciones callejeras, así como un batallón de paracaidistas para despejar los accesos a San Cristóbal.

Un elemento nuevo ha sido la irrupción de “colectivos” armados, grupos irregulares que se desplazan principalmente a bordo de motocicletas y que actúan tanto para confrontar a los manifestantes como para castigar residencias en zonas opositoras de ciudades como Caracas y Mérida (suroeste), con disparos y destrozos a vehículos y ventanales.

Para Alvarado se trata de “paramilitares de izquierda”, que se amparan en el trabajo social en barriadas de Caracas y otras ciudades para ejercer la violencia en favor del gobierno. Maduro advirtió contra “la demonización de los colectivos”, a los que elogió en distintos actos.

No todos los colectivos chavistas o revolucionarios, como se llama a grupos oficialistas y seguidores del fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013) están armados y ejercen la violencia.

Luis Cedeño, de la organización no gubernamental sobre seguridad Paz Activa, dijo a IPS que “bandas parapoliciales, que en ausencia del Estado controlan ciertos espacios urbanos, se autodenominan colectivos y actúan como un brazo armado del oficialismo para así obtener cierta legitimidad e impunidad”.

El desarme y disolución de estos colectivos se han convertido en una consigna opositora.

Ante ese panorama, Alvarado criticó que “la Fiscalía y la Defensoría, que debían actuar de oficio, han hecho oídos sordos, han adelantado indebidamente opinión en favor del gobierno y culpado a dirigentes opositores, y además han callado ante la contaminación de pruebas efectuada por responsables del Poder Ejecutivo”.

Rodríguez y Alvarado deploran que las fuerzas de seguridad y otros poderes públicos ignoren la Ley para Prevenir y Sancionar la Tortura, aprobada en forma unánime por el parlamento hace menos de un año.

“En Venezuela no se tortura”, remarcó Maduro en conferencia de prensa el sábado 22.

También el periodismo ha encajado golpes. Organizaciones periodísticas han denunciado 62 agresiones en el marco de las protestas de este mes. Incluso se vedó la señal de televisión por cable de la estación colombiana de noticias NTN24 y pende la amenaza de hacer otro tanto con CNN en Español.


Para Alvarado, el Mercado Común del Sur (Mercosur, de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela), y la Unión de Naciones Suramericanas “pueden hacer un aporte de mediación, con base en las cláusulas en favor de la democracia, los derechos humanos y el diálogo político, incluidas en los textos que le dan soporte a su existencia”.








lunes, 24 de febrero de 2014

Líderes deben desapegarse de intereses personales para promover la paz

Modelaje de violencia inicia con imitación y el entorno


El padre, el jefe, el capitán del equipo, el político o el líder vecinal brindan ejemplos con sus palabras y acciones que crean un ambiente cuyas condiciones son imitadas por sus cohabitantes.

Promover la paz, aumentar la tolerancia y practicar la otredad empieza en el lenguaje. Igual que la inclusión en aspectos sociales como la diversidad sexual o funcional, el discurso de género o las normas de cortesía, el reconocimiento otorgado en la retórica abre las puertas a la tolerancia, la comprensión y el entendimiento. Una espiral similar a la de la violencia, donde la agresión y hostilidad física comienza en la verbal y psicológica con los insultos, descalificativos, gritos e intimidación, pero que gira al contrario.

La violencia puede tener causas diversas según las teorías sociológicas. Las dos principales son las relacionadas a la pobreza y desigualdad social y la segunda en la violación de la norma por parte de modelos sociales como las celebridades, los padres y los políticos, quienes inducen conductas por imitación. Así lo señaló Roberto Briceño León, director del Observatorio Venezolano de Violencia, en un foro sobre “Violencia, cifras, causas y soluciones” en Maracay a principios del mes de febrero.

Para el caso de la violencia, sus efectos tendrían similitudes con la teoría de la ventana rota. En esta última, un automóvil dejado en una zona rica pasó 48 horas sin daños, hasta que los investigadores le rompieron uno de los vidrios, causando lo que había pasado en los primeros minutos en la zona pobre. Fue desvalijado.

Similarmente, varias investigaciones han certificado que la cercanía a áreas verdes, a espacios recuperados, limpios y ordenados, tienden a reducir notablemente los niveles de estrés, la depresión y la ansiedad, provocando que los espacios públicos y comunitarios sean más concurridos. De esta forma, el lenguaje de inclusión, tolerancia y aceptación del otro puede brindar beneficios similares para la paz y la convivencia.

El psicólogo Reinaldo Olavarrieta, directivo de la Sociedad Venezolana de Psicología de la Salud, acepta que la violencia también la aprendemos del entorno, lo que se traduce en una alerta constante. Esto hace que el cerebro suplante el modo de supervivencia a uno de alerta. “Si vemos que alguien camina mucho tiempo detrás de nosotros, si escuchamos al motorizado que gira repentinamente, eso se nos hace cotidiano”.

Por su parte, el médico psiquiatra Fernando Jiménez, dice que el discurso político también se ha vuelto violento, de un bando y otro, como causa o respuesta. “Cuando ignoran tu queja, cuando te dicen que no hay razones para protestar, también es violento, y eso impulsa una respuesta violenta que puede traducirse no sólo en acciones violentas en la calle, sino en malestar, trastornos emocionales, cuadros graves de ansiedad y depresión”.


PACTO DE ÉLITES

El sociólogo Luis Cedeño, de la ONG Paz Activa, explica que hubo un rompimiento del pacto social con El Caracazo en 1989 y del institucional en 1992, con los atentados militares para derrocar el gobierno, en ambos casos, un grupo de ciudadanos desistió de ceder el monopolio de la violencia en el Estado para la protección de la sociedad y empezaron las agresiones entre personas sin mediación estatal.

“Lo que se requiere es un pacto de élites, de los participantes del conflicto para salir del juego de no suma cero, en el que nadie cede nada. Lo que hace falta es la negociación, llegar a un acuerdo entre las partes”. Paz Activa ha propuesto desde el año 2000 tres métodos alternativos de resolución de conflictos: mediación, conciliación y negociación. “Dentro del Plan Nacional de Negociación, vimos que se incluyó la justicia de paz, que es una forma alternativa de resolver los conflictos”.

Cedeño señala el modelaje que nace en las élites. “Si allí hay descalificación, estas serán imitadas. Hace falta que entiendan este tiempo histórico con actitudes desapegadas, en la que la medición de fuerzas no permite buscar soluciones hasta que se tranque el juego”, explicó

Briceño León recordó la única época del país cuando bajó la tasa de homicidos, de 1994 a 1998. “Pasó de 4.700 a 4.550 muertes violentas por año, cuando hubo un claro esfuerzo por reforzar la institucionalidad y brindar espacios para la conciliación. Por ejemplo, Caldera le entregó el Plan de Paz de Catia al Movimiento Al Socialismo (MAS), que era oposición, perdona a los golpistas del 92 y el Ministro de Justicia, José Guillermo Palacios, declaró que se suspendían todos los nuevos portes de armas, incluso para sus amigos, lo que brindó una nueva confianza en la autoridad y la norma”.

El director del OVV pide como soluciones actuar por igual con políticas sociales para reducir la pobreza y la desigualdad junto a la “desideologización” de la seguridad ciudadana. “Se creyó que la inseguridad social obedecía a una lucha de clases, de pobres contra ricos, por lo que no era algo tan negativo, pensando además que la represión policial era violencia contra los pobres, por lo que no puede permitirse”. Citó además las altas cifras de impunidad que han monitoreado en los últimos 20 años. “En 1998 se realizaban 110 detenciones por cada 100 homicidios, mientras en 2009 hay entre 8 a 9 detenciones por cada 100 asesinatos”, para finalmente depurar y recuperar la confianza en los cuerpos policiales. “Nuestras encuestas señalan que 56% de los venezolanos cree que la policía está involucrada en la delincuencia, mientras 60% considera que es peligroso ayudar a los cuerpos de seguridad. 3 de cada 4 venezolanos cree que los militares están relacionados con el narcotráfico”, enfatizó.


¿QUÉ PUEDO HACER?

Desde lo individual también podemos ser agentes de cambios. Olavarrieta brinda estos pasos ante la violencia:

- Canalizar mis acciones. ¿Realmente estoy en peligro, este es un riesgo verdadero, qué resultado tendré?
- Reconocer el estado emocional. ¿Lo que siento es miedo, ansiedad, rabia?
- Enfocar asertivamente. No siempre hace falta dañar un poste, quemar caucho, agredir al vecino, sino ser efectivo y asertivo.

Sin embargo, el experto advierte que aunque somos modeladores conductuales de los otros, sino eres violento en una comunidad o situación violenta, puedes ser agredido por salirte de lo que se considera normal en ese lugar o momento.

Jiménez coincide en sus recomendaciones:

- Reconocer la situación, estando tan informados como seamos posible. ¿Qué tanto me afecta y cómo?
- Analizarse como individuo: ¿Hasta dónde puedo llegar y si lo haré, qué mejora traerá para mí?
- Tomar distancia del problema, cuidar la salud psíquica por la rabia, ira e indignación que produce la violencia y/o la injusticia
- Buscar asesoría profesional. “Admitir problemas mentales es difícil, pero dentro del abanico de éstas hay muchísimas distintas a la locura, muchas de las cuales el colectivo ignora que deben ser tratadas, hay que superar la idea del psiquiatra como alguien que receta medicación. No es sólo venir a consultas, sino hacer preguntas, como una entrevista”.


SU PALABRA VAYA POR DELANTE

“El respeto al otro, mediante el uso adecuado del lenguaje, es fundamental para comunicarse en una sociedad civilizada, especialmente cuando los problemas que confronta la autoridad exigen su comprensión. De allí la necesidad de la corrección y precisión en la expresión utilizada en la comunicación verbal, buscando la compresión de lo que sucede a fin de compartir las posibles soluciones mediante el diálogo”, escribió la socióloga Maritza Izaguirre, Decana de la Facultad Ciencias Económicas y Sociales de la UCAB, en enero de 2013, en su artículo titulado “Violencia y lenguaje”.

El bullying o acoso escolar ha dado muestras fehacientes de la fuerza del lenguaje para crear situaciones desagradables, una herramienta que puede ser utilizada para el cambio. “Tenemos que aprender a aplicar la Escucha Asertiva, que es escuchar ideas que no compartas sin caer en la enemistad, practicar la tolerancia con tu pareja, tu familia, tus vecinos, en el trabajo, en la cola del banco, para que se expanda. Es realizar una instauración de la tolerancia”. Alerta que hay una patología que se ha aprendido como estilo conductual, el pasivo-agresivo. “Si me tocas, si me molestas, te ataco”. “Eso no es paz, es una amenaza”, exclama el sociólogo Olavarrieta.

Una golondrina puede no hacer verano, pero cuando los cambios individuales se unen, esta red puede hacer muchas cosas, diserta Jiménez al respecto. “Nos agreden cuando nos cambian nuestra manera de vivir, porque es injusto. Cuando te parten el vidrio del carro para robarte a plena luz del día, si ignoran tus quejas, si te descalifican, buscas protegerte de lo que puede interpretarse como terror, y allí hay que pasar de lo colectivo a lo individual.

“Si me descalificas, yo no lo hago, si me acusas de algo y al analizarme, no me identifico, ignorarlo, pero además, conviene evitar discutir sobre religión y política, que sólo terminan en conflictos”, insiste Jiménez, quien ha tratado a familias con diferencias de este estilo dentro de sus miembros, que permanecen viviendo juntas, pero han logrado entenderse. “Hay que sopesar que el que reclame tiene razones válidas para hacerlo”.


PARECER VÍCTIMA, NO SERLO

Julio Burga es monitor certificado del Sistema Progresivo de Autodefensa (SPAD), con origen en Argentina. Brinda charlas gratuitas junto a varias ONGs y Fundaciones, así como cursos privados para público en general. En una reciente en la Parque La Estación, en la Avenida Constitución, vecinos recibieron instrucción básica de cómo lidiar con individuos violentos, con un 90% de posibilidades de evitar la pérdida de bienes materiales y si esto no es posible, salir completamente ilesos.

“El robo promedio dura entre 12 y 20 segundos, por lo que el delincuente común trata de hacerlo rápidamente para evitar ser visto, detenido o perseguido. Por tanto, alargar el proceso de interacción con éste, reduce notablemente su radio de acción, logrando que desista de su acción”.

Burga da además varios consejos cuando enfrentes a alguien violento, sea para hacerte un reclamo, amenazarte, intimidarte o tratar de robarte. Siempre con personas no armadas.

- Bajar la guardia en lugar de lucir demasiado confiado, airado o confrontar. Elevar los niveles de violencia causará que el atacante haga lo mismo.
- No ser víctima en tu mente. Usar la diplomacia para convencer que quieres resolver negociando, dialogando, sin agresividad. El 90% de los enfrentamientos pueden resolverse en la interacción, haciendo preguntas para reafirmar lo que te cuestionan, lo que piden, pero sin repetir el argumento. No resistirse al robo, sino provocar que la atención se vaya a distintos lugares, no que gire en tres frases. Esta habilidad puede ser innata o practicarse: “¿Qué quieres, este bolso, tan viejo? Me lo regaló mi mamá, ¿y si en vez de eso te doy el dinero que resuelve más? ¿De qué persona me hablas? ¿Ella no es la hermana de tu vecino?”.
- Si el caso es reiterativo y has disuades varias veces al individuo, en SPAD recomiendan la confrontación verbal de forma firme, pero sin herir egos ni actuar con agresividad, insistiendo en estas preguntas “¿Me puedes explicar cuál es el problema conmigo? ¿Qué quieres que haga? ¿Qué buscas lograr con tu actitud?”, insistiendo que no quieres pelear, sino ponerle punto final al acoso, explicó.




jueves, 20 de febrero de 2014

Sociólogo: Cuando se acabe con la impunidad serán efectivos los planes de seguridad

El director del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), Roberto Briceño, explicó que cualquier política pública de seguridad "se mide por su resultado". Afirmó que los 22  planes del Estado "no han sido eficientes" y añadió que "cuando se acabe con la impunidad (estos planes) tendrán efectividad". 

Exhortó al Gobierno a que se exalte la ley como el mecanismo que resuelve los conflictos para acabar con la impunidad. 

Briceño aseguró, en el programa Soluciones de Globovisión, que los últimos 15 años ha incrementado los índices de criminalidad en el país y reiteró que se debe a la "impunidad muy grande que se vive". 

Destacó que la organización "realiza proyecciones con datos parciales para mostrarle una cifra al país de asesinatos violentos" y acotó que desde el año 2003 "existe una censura oficial de la cifras". 

Exhortó a que "la policía tiene que ser despolitizada" para que este cuerpo de seguridad pueda garantizar el resguardo de todos los ciudadanos. También se refirió a las cárceles y aseguró que existen los mismos problemas desde hace 3 años, cuando se creó el Ministerio de Asuntos Penitenciarios. 

Paz Activa: El delincuente de hoy es más joven que el de hace 20 años 

El director de la  Organización No Gubernamental Paz Activa, Luis Cedeño, explicó el perfil del delincuente venezolano y aseguró que "es mucho más joven que el de hace 20 años". 

También señaló que en años anteriores, el criminal era mayor de edad y con escolaridad parcial y dijo en la actualidad un niño entre 10 y 13 años "ya entra en la carrera delictiva"

Detalló que esta nueva generación de los "coco secos" se debe a que "desde muy pequeños observan el patrón delincuencial en su entorno y ven los beneficios del empoderamiento criminal". 

Añadió que estos jóvenes "no sienten respeto por la vida de nadie y es porque a ellos también se le han irrespetado sus derechos" y explicó que las fallas en la sociedad perjudican a estos jóvenes que ante falta de oportunidades se dedican a delinquir. 

Robert Serra: "Vamos a desarmar a todos los que estén armados" 

El diputado de la Asamblea Nacional, Robert Serra, se refirió a las recientes manifestaciones en el país, acotó "ahora dicen que son infiltrados". Cuestionó que "si son infiltrados por qué exigen su libertad". Asimismo, consideró "que se le ha querido endosar la violencia a los colectivos". Sobre que estos grupos pudiesen portar armamentos, el diputado aseguró "vamos a desarmar a todos los que estén armados". 

Asimismo, destacó que el Plan de Pacificación Nacional se diferencia de las otras iniciativas del Gobierno, porque en esta ocasión tiene una trascendencia hacia otros sectores políticos. Mencionó la reunión del ministro de Interior Justicia y Paz, Miguel Rodríguez Torres, junto a todos los alcaldes del país sin distinción ideológica. 

El presidente Nicolás Maduro anunció el pasado 8 de enero que se está preparando una Ley de Pacificación para la "construcción de la paz desde adentro de las comunidades". 

Serra añadió que el problema de la inseguridad “es estructural y  tiene que ver con toda la sociedad”. Dijo que la formación de valores para la paz y vida son importantes para la contribución de este nuevo plan.

COLECTIVOS: Los Tupamaros, el brazo armado del chavismo

La banda hampónil manifestó estar “Armados con la Constitución”, (* "Constitución” es un facsímil de fusil de guerra) de esta manera los Tupamaros dijeron presente en la concentración del 4-F.
El colectivo paramilitar manifestó estar, “Armados con la Constitución”, (* “Constitución” es un facsímil de fusil de guerra) de esta manera los Tupamaros dijeron presente en la concentración del 4-F.

La anarquía cobró mayor temperatura
con la irrupción de los tupamaros


Los Tupamaros son una especie de la “SS hitleriana”.
 Colectivos urbanos armados, ¿un peligro latente para Venezuela?.
 Esta semana las personas afectas al presidente Chávez salieron nuevamente a las calles para demostrarle su apoyo y respaldo al Gobierno.
 Acusados de haber atacado y asesinado con armas de fuego a los estudiantes opositores, integran grupos motorizados que están desde 1992 al servicio de la revolución bolivariana.
 En esta ocasión el Movimiento Revolucionario Tupamaro también se movilizó en la marcha y con una simulación de fusil dejaron claro que “están armados con la Constitución” y esta será defendida por los exguerrilleros.
Asimismo, la organización política venezolana de tendencia marxista se identificó con banderas, camisas, gorras y pañoletas que llevaban las insignias con el nombre de los Tupamaros. Sin duda, la vestimenta ha sido una de las características más generales atribuidas al Movimiento Revolucionario. Según datos, hasta el año 2003, los Tupamaros usaban máscaras y pasamontañas para cubrir sus rostros a fin de no revelar su identidad.
La organización en sus orígenes fue acusada de realizar actos terroristas. Sin embargo, en los últimos años han ejercido una actividad política en el sistema democrático venezolano.
A pesar de los disturbios y de la gente herida, no ha habido comentarios de funcionarios del Gobierno sobre los incidentes.
A pesar de los disturbios y de la gente herida, no ha habido comentarios de funcionarios del Gobierno sobre los incidentes.
Su nombre oficial es Movimiento Revolucionario Tupamaro (MRT), pero se lo conoce comunmente como Tupamaros. Este constituye un brazo armado del chavismo, cuyo origen se remonta a 1992, año del frustrado golpe de Estado de Hugo Chávez contra el gobierno de Carlos Andrés Pérez.
Su nombre proviene de la organización guerrillera uruguaya conocida como Tupamaros. Estas fuerzas de choque que responden a los intereses del gobierno de Venezuela, y que se caracterizan por trasladarse en motos y con los rostros cubiertos para no revelar su identidad, son acusadas de haber reprimido este martes y miércoles a estudiantes que se manifestaron contra “el desastre de Maduro” y por la liberación de sus compañeros detenidos.
Incluso algunos integrantes de esta banda han formado parte de boletas electorales para el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Este miércoles 12 de enero, mientras miles de estudiantes recorrían las calles de toda Venezuela, los Tupamaros arremetieron contra los protestantes a los tiros. Como resultado de estos ataques, tres personas fallecieron y 23 resultaron heridas.
Si bien el clima cobró mayor tensión cuando los estudiantes se negaron a retirarse de la sede de la Fiscalía General de la República, donde no lograron la liberación de los estudiantes detenidos, el caos y la balacera comenzó cuando llegó el grupo motorizado.
Esta organización de tinte chavista comenzó sus operaciones en el populoso barrio 23 de enero del Municipio Libertador (oeste de Caracas) y con el paso del tiempo fue logrando una mayor expansión, siempre con cierto respaldo político. Además, también supo entablar fuertes lazos con movimientos estudiantiles, también afines al gobierno bolivariano.
Su expansión fue tal que, hoy en día, cuentan con radios y canales de televisión y controlan diversas zonas carenciadas de Caracas, especialmente en el 23 de enero. Ubicado a metros del Palacio de Miraflores, sede del Gobierno, el barrio está conformado por una serie de edificios en serie construidos sobre una colina. El lugar siempre ha sido bastión electoral del chavismo.
El poder que cobraron en estas zonas los llevó a contar con la protección de sus habitantes. Allí, los Tupamaros “limpian” el área de aquellos delincuentes que no les son fieles. Sin embargo, ellos mismos en reiteradas ocasiones han sido acusados por ataques a comercios e importantes edificios por considerarlos oligarcas y burgueses.
Otra “lucha” que encabezan estos grupos es contra los narcotraficantes. Han asesinado a vendedores y distribuidores, que han querido penetrar en sus zonas de influencia. Aunque no está comprobado, se sospecha que el principal motivo es la preocupación del grupo por controlar el negocio.
De esta manera, además de contar con el poder total de las Fuerzas Armadas y de diversos cuerpos oficiales, el chavismo también cuenta con el apoyo de este brazo armado que opera en pos de “la revolución bolivariana”.
Dinorah Figuera, informó que recopilan los datos exactos para iniciar la averiguación y les preocupa que el acto esté avalado por el diputado del PSUV, Robert Serra.
El diputado del PSUV, Robert Serra, en contubernio con la GNB al mando del Gral. Orlando Rodríguez apoyan abiertamente a el grupo paramilitar de “La Piedrita” dirigido por Valentin Santana, actualmente profugo de la justicia.
Colectivos Urbanos:
A unos 15 minutos del Palacio presidencial de Miraflores está el barrio 23 de Enero, en el oeste de Caracas. Una calle sube aún más en el cerro pero que pocos se animan a cruzar. Por encima un arco anuncia: “Bienvenido Colectivo La Piedrita”.
Se trata de una especie de frontera que marca el ingreso a una zona gobernada por uno de los colectivos armados más famosos de Venezuela: “Debo haber pasado hacia allá dos veces en mi vida”, dice Felix, un taxista que hace 50 años que vive en 23 de Enero pero no se anima a cruzar del otro lado.
“Los colectivos son grupos paramilitares de izquierda con el aval del gobierno, que no hace nada ante ellos”, dijo a la agencia dpa el director del Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV), Roberto Briceño León.
“Durante años el gobierno se ha dedicado a dar armas a grupos proclives, ahí entran los colectivos. Los policías no pueden ingresar al 23 de Enero. Mientras, salen fotos con niños 8 años con AK-47 al lado de un diputado”, señaló, en referencia a unas imágenes que generaron polémicas en los medios hace poco más de un año.
Briceño León define a los colectivos urbanos como “brigadas de choque que en momentos puede utilizar el gobierno” y se alarma por el riesgo que representan: “Cuando tienes un arma y una moto y te parece insuficiente lo que te dan de dinero decides que tienes que hacer un dinero extra y se pasa al delito común”.
En las calles del 23 de Enero hay paredes pintadas en favor del fallecido presidente Hugo Chávez y otras de La Piedrita. Sobresale un enorme grafiti de Jesús sosteniendo en sus manos la Constitución y a su lado la Virgen de Coromoto con un rifle, patrona de Venezuela.
En el 23 de Enero hay 57 edificios con 150 departamentos que fueron construidos en la época del gobierno militar de Marcos Pérez Jiménez (1953-1958). Alrededor hay tres docenas de edificios más pequeños y el resto son casas que invadieron la zona en los últimos 50 años, trepando los cerros y eliminando lo que fueron espacios verdes.
Cuando cayó la dictadura, se decía que en esta zona se alojaban los comunistas y los sectores de izquierda. Ahora, allí no entra la policía nacional porque no tiene jurisdicción y todo es controlado por los colectivos.
Poder Ciudadano realizó una denuncia ante la Comisión de Derechos Humanos en torno a cinco colectivos armados (La Piedrita, Montaraz, Simón Bolívar, Los Tupamaros, Alexis Vive) que “públicamente habían exhibido armas de guerra sin la respuesta de punibilidad, averiguación penal o algún tipo de apertura de juicio”.
“Es decir, veíamos como estos grupos armados estaban aceptados por el Estado, al margen de la ley, afectos ideológicamente al proyecto que lideraba Chávez”, dijo la directora de la ONG, Rocío San Miguel.
¿De dónde provienen las armas que utilizan?
Por acción u omisión por responsabilidad de las Fuerzas Armadas. No existe un registro de todas las armas que produce el Estado. Hay faltantes y podrían estar alimentando el circuito de armas ilegales para grupos armados al margen de la ley”, señaló.
San Miguel destacó que los cinco colectivos denunciados funcionan en trece kilómetros alrededor de Miraflores, razón por la que se los llama “Los custodios de la Revolución.
El sociólogo Luis Cedeño, director de la ONG Paz Activa, dijo a dpa que los colectivos armados “ejercen un control paramilitar ante la ausencia policial, ejercen una autoridad y se nutren de puntos de peaje cobrando dinero”.
“Controlan a los grupos delincuenciales, probablemente controlan el microtráfico de drogas de la zona y evitan que hayan mayores conflictividades”, dijo e indicó que “una tarea que tiene el gobierno que asuma es eliminar estos grupos porque se trata de un tema de seguridad nacional”.
“Estos colectivos tienen sus líderes que pueden o no responder a un liderazgo político. Se ha visto que hay vínculos de esos líderes y algunos líderes de la revolución”, sostuvo Cedeño.
“Los colectivos tienen que tener recursos para financiarse. Podría venir del Estado, que apoya a los colectivos en general, porque también están los colectivos culturales. No quiero decir que los recursos que el gobierno le da a los colectivos se usan para comprar armas. Simplemente digo que hay colectivos que se desvían para tener funciones policíacas y militares”, explicó el sociólogo.
Para Cedeño, el riesgo de los colectivos pasa porque son personas que “atentan contra la seguridad nacionalidad teniendo armas de guerra. Pueden o no estar controlados por el gobierno pero están fuera de la ley, eso está claro”.
El analista político John Magdaleno cree que en el chavismo “hay conciencia” de la peligrosidad de los colectivos armados: “Tienen su actuación a la libre sin ninguna capacidad de control por parte de las autoridades”.
“Creo que hay conciencia de la imagen negativa que les procura. Es una manera de quitar legitimidad a sus relatos. El problema es cuánta capacidad de control tienen las autoridades sobre esos grupos, ese es la cuestión de fondo. No siempre está muy claro que hay capacidad de control absoluto sobre estos grupos”, dijo.

Con el arribo al poder del General Carlos Mata Figueroa , han llegado a Margarita todas las cosas malas que le son inherentes a los gobiernos de cortes fascistas, como el que este general representa.
Con el arribo al poder del Gral (r) Carlos Mata Figueroa , han llegado a Margarita todas las cosas malas que le son inherentes a los gobiernos de cortes fascistas, como el que este general representa.
En Nueva esparta:
Dentro de estas cosas malas que llegan a nuestro estado, están el llamado Colectivo de los tupamaros, grupo que se fundó en el anárquico barrio del 23 de Enero al oeste de Caracas, cuyas ramificaciones se han extendido como toda mala yerba de forma rápida por todo el territorio nacional.
Los Tupamaros es un grupo criminal que actúa como brazo mercenario del régimen chavista, para intimidar a la disidencia política a través de acciones violentas de todo género. Desde el gobierno central y desde algunas gobernaciones chavistas, se les provee de armamentos sofisticados y fuerte apoyo financiero. La mala noticia es que ahora están aquí para sembrar el terror en nuestras islas de Margarita y Coche.
En el edificio donde opera la gobernación del estado Nueva Esparta en la Asunción, empleados de la misma, nos reportan que están siendo intimidados por miembros de este grupo Tupamaro que han sido apostados en cada uno de los pisos que conforman el edificio de la gobernación. El acoso es de tal magnitud que los funcionarios sienten invadidos sus espacios vitales, no permitiendo el normal desenvolvimientos de las actividades de la administración.
Fuentes ligadas a la policía de Nueva Esparta (INEPOL) que cuentan con toda nuestra credibilidad, nos informan que un número importante de elementos pertenecientes a este grupo mercenario, han integrado un escuadrón motorizado que usa unidades BMW asignadas originalmente a la Guardia Nacional Bolivariana y cuentan con total apoyó de éste componente militar, para sus acciones irregulares.
El temor de nuestra fuente es que estos Tupamaros estarían trabajando para conformar grupos de exterminio tal y como los existentes en el 23 de Enero, que han cobrado la vida de opositores al régimen de Chávez, así como ejecuciones extrajudiciales de supuestos delincuentes.
Según informaciones provenientes de la oficina de drogas estadounidense Drug Enforcement Administration (DEA) , este grupo Tupamaro controla el micro-tráfico de drogas en la zona oeste de la capital de Venezuela e incluso está incursionando en el trasiego de cocaína hacia países centroamericanos, para financiar parte de sus actividades criminales en el campo político.
Los neoespartanos estan alertas y prestos a denunciar todos los movimientos que realice esta organización criminal en nuestro estado, de tal manera que evitemos que se consolide su poder en nuestra región, evitando que esta suerte de SS hitleriana siembre el terror en nuestras isl

Las zonas rojas de la 'pacificación'

Las zonas rojas de la 'pacificación'

Valentina Oropeza  El Nacional de Caracas, GDA  Lunes 10/02/2014 

Venezuela esperará una semana más para conocer en qué consiste el plan de pacificación para mejorar la seguridad.

El gobierno del presidente Nicolás Maduro había ofrecido hacerlo el sábado último, pero fue suspendido. El plan contiene algunas estrategias como la negociación con bandas delictivas, instalación de 'zonas de paz', patrullaje inteligente por cuadrantes, una ley de desarme a la espera de reglamento, la ampliación de las comunas y la intervención del Estado en la programación de los medios.

 Las medidas llegan por el escándalo que desató el asesinato de la ex Miss Venezuela, Mónica Spear, y su marido Thomas Berry, el 6 de enero en la noche. El año pasado, Maduro hizo un cambio sustancial en las políticas de seguridad ciudadana de Hugo Chávez: incorporó a los militares a la persecución de la delincuencia en el Plan Patria Segura. 

Este año convoca a los alcaldes de la oposición para legitimar la estrategia gubernamental y define la respuesta del Ejecutivo como "pacificación", un término ajeno al derecho internacional humanitario pero que tiene un antecedente en Brasil. A diferencia del caso brasileño, en Venezuela el Gobierno no ha identificado a un enemigo compacto y jerarquizado como el narco, sino una amenaza a la seguridad ciudadana atomizada. 

Luis Cedeño, director de la organización Paz Activa, se pregunta si las "zonas de paz" servirán como espacios para actividades de prevención del delito o más bien para militarizar pueblos y ciudades, al tiempo que cuestiona que el Gobierno no revele qué prebendas ofrece a las bandas a cambio de entregar las armas y desmovilizarse. "Si estos acuerdos no son transparentes, será muy difícil convencer a la ciudadanía de que se beneficiará de una nueva política". 

El criminólogo Freddy Crespo duda que el desarme ayude a disminuir la violencia dado que el año pasado aumentó la criminalidad a pesar de que se incautaron de 400 000 armas. "Debería plantearse el debate de legalizar las armas, porque el problema no radica en la posesión sino en el uso que se hace de ellas y en las dificultades que tienen las autoridades para rastrear su actividad". 

Crespo considera que la estrategia de dividir a la Gran Caracas y a los altos mirandinos en 158 cuadrantes, y habilitar números locales para que policías y militares atiendan las denuncias en el menor tiempo posible, no será exitosa sin la participación de la ciudadanía. "Este modelo fue aplicado en Colombia y permitió bajar los índices de delitos porque las comunidades se apropiaron de los espacios públicos".

 Roberto Briceño León, director del Observatorio Venezolano de la Violencia, alerta que delegar las funciones de seguridad en las comunidades implica "privatizar" la protección de un derecho que el Estado debe garantizar a todos los ciudadanos sin importar su afinidad política.

Frente a la prioritaria necesidad de derrumbar la tasa de homicidios, los expertos aseguran que la revisión de los contenidos divulgados por los medios de comunicación aportará poco al control de la criminalidad si no se garantiza el desmantelamiento de incentivos que promueven la impunidad como la corrupción en los cuerpos de seguridad del Estado y las cárceles, o la incapacidad de los tribunales para investigar y procesar a los sospechosos de delitos en los plazos que establece la ley. 


  • Militarización en Brasil 

La elección de Brasil como sede del Mundial de Fútbol este año y de las Olimpiadas en 2016 le puso fecha de entrega a una tarea aplazada: rescatar a los habitantes de las favelas del yugo del narcotráfico.

En el 2008, la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Río de Janeiro diseñó una estrategia inédita: primero, avisar a los narcotraficantes con una semana de antelación que se avecinaba una intervención policial. Segundo, desplegar fuerzas especiales con equipamiento militar para "limpiar" las favelas de la presencia de grandes capos de la droga y sus jerarquías menores. La paz de 'combos' 

Respetar el control territorial de cada banda, detener las confrontaciones, levantar las fronteras imaginarias que impedían el libre tránsito y aplicar la pena de muerte a quien rompiera la tregua fueron las cuatro cláusulas de un pacto de convivencia de los Urabeños y la Oficina de Envigado en Medellín (Colombia). 

Son dos 'combos' bandas criminales que actúan en la capital de Antioquia y que bajó los homicidios en 26,5% el año pasado. Las autoridades atribuyen este logro a la desarticulación de 4 bandas y la captura de 1 232 de sus integrantes, y a la inversión en escuelas, hospitales, parques, bibliotecas. El sociólogo Luis Guillermo Pardo, quien fue asesor de paz del gobierno de Antioquia de 1998 al 2000, advierte que la proliferación de grupos armados cada vez más sofisticados dificulta a las autoridades la intervención en los llamados "pactos de fusil" entre bandas. 

En contexto 

El ministro de Interior, Miguel Rodríguez, informó de la suspensión de la presentación del Plan de Pacificación anunciada para el sábado, hasta que finalice la gira en materia de seguridad en la que se está reuniendo con autoridades. El plan se lanzaría en esta semana.


Joven y desempleado, entre el aeropuerto y la autogestión

Diáspora reciente es atribuida a la violencia
Domingo, 09 febrero a las 20:58:05



La celebración del Bicentenario de la Batalla de La Victoria encuentra a un tercio de la población, adolescentes y adultos jóvenes, entre la decisión de emigrar o forjarse un destino en el país, en medio altos índices de homicidios y desempleo, así como nuevos planes oficiales de pacificación y apoyo juvenil.
Con una tasa de nacimientos de 4.2 hijos por mujer en 1971 que se redujo a 2.2 para 2011, nuestro país posee una edad promedio de 26 años según Censo 2011 realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Según la II Encuesta Nacional de Juventud, 77% de los estudiantes universitarios se quiere quedar en el país tras graduarse. El resto, un universo aproximado de 942 mil estudiantes, no esperan permanecer en Venezuela. Datos de la Organización de Naciones Unidas aseguran que 630 mil venezolanos residen oficialmente fuera de nuestras fronteras.
El sociólogo Luis Cedeño, director de la ONG Paz Activa, describe este comportamiento: “Venezuela no es un país de emigrantes, probablemente porque con el boom petrolero se vivía relativamente mucho más cómodo que en otros países, donde los extranjeros saben que deben empezar de cero y trabajar el doble”. “Salvo el pequeño éxodo en los 80, después del Viernes Negro, nuestro país siempre fue receptor”.

“Esta situación se transformó a finales de los 90 y principios del 2000. Ahora los jóvenes clase media, que se sienten desplazados por la violencia homicida, son quienes emigran”. Desde el video viral, “Caracas, ciudad de despedidas”, los que se van han sido objetos de críticas, con el tema de la identidad nacional como eje de la discusión. “Venezuela es un país pero no una nación, entendiéndose ésta como una población que posee un futuro compartido, de echar adelante juntos. Por eso nos sentimos emocionados cuando desde afuera nos dicen que la arepa es el mejor desayuno del mundo”, ironiza Cedeño.

Mientras tanto, cientos de jóvenes acampan hasta por tres días en las aceras de la Embajada de Irlanda para tramitar un sello para salir del país a estudiar inglés. Muchos de los que se han ido aprovechan la facilidad de trámite de visas de residencia y trabajo temporal para quedarse en el país europeo.
 

MILLONES PERO DESEMPLEADOS


El Censo 2011 encontró que hay 14.903.075 venezolanos de entre 0 a 29 años, 53,73% de la población. 7.546.301 son adolescentes y adultos jóvenes, entre 15 y 29 años, pertenecientes a la población económicamente activa. Sin embargo, el desempleo juvenil es del 11.2%, el doble que el índice nacional, ubicado en diciembre en 5,6%, según el propio INE.

Para el partido Primero Justicia una de las soluciones es la Ley de Primer Empleo, que introdujo junto a 21 mil firmas de apoyo en la Asamblea Nacional en marzo de 2011. Con la misma se lograría, en palabras del diputado Juan José Caldera, “darle trabajo a 100 mil jóvenes el primer año” para formalizar los contratos para recién graduados, pasantes y aprendizajes con incentivos fiscales y parafiscales a las empresas.

El 5 de febrero de 2014, concejales y jóvenes de la tolda aurinegra protestaron en la Asamblea Nacional para que se recupere la discusión del proyecto, alegando que 500 mil jóvenes buscan aún su primer empleo. El parlamento había anunciado su inclusión en la nueva Ley Orgánica del Trabajo.

Para Rodrigo Campos, diputado suplente por PJ en el Consejo Legislativo del estado Aragua, en el año 2013 hubo avances de reintroducir el debate en el parlamento regional por medio del diputado Elías Bermúdez. “Pudimos conciliar las diferencias con el PCV, que también tienen una propuesta para el empleo juvenil, con una visión distinta, pero que podemos trabajar juntos”.

“Impulsaremos ordenanzas respectivas en los 18 municipios, como ya se hizo en Chacao y Baruta, más ahora que vemos estas colas en las embajadas, estamos convencidos que la mejor opción para romper el círculo vicioso de recién graduados que no consiguen empleos porque les piden experiencia que no pueden obtener porque no hay empleos en su sector. Para este 12 de febrero trataremos de lograr un acuerdo en la cámara municipal de Ribas, donde presidimos la misma, para hacer una sesión conmemorativa”.
 

JÓVENES DE LA PATRIA


Lanzada el 5 de junio del 2013, va desde la educación sexual, la competencia deportiva, los retos académicos y la ruta turística estudiantil, los estudios de grabación, un sistema de festivales y hasta un canal de televisión por Televisión Digital, ZUM TV.

Daniel Perdomo, secretario de Juventud de Aragua, adelanta avances locales, cuyo foco es en liceístas. “En 30 liceos pilotos crearemos una Sala Audiovisual para cine foros, fotografía y producción audiovisual junto al colectivo fotográfico D72 y el profesor de cine, Rubén Serrano. En agosto esperamos tener 120 contenidos producidos por liceístas para el Festival de Cine “Jóvenes de la Patria”, no sólo para los medios públicos y comunitarios, sino para espacios juveniles y redes sociales”.

“El objetivo es crear una estructura de 15 mil jóvenes con militancia, responsabilidades políticas definidas”. La Misión también se coordina con A Toda Vida Aragua. “Las principales víctimas y victimarios de la violencia son los adolescentes, por lo tanto daremos prioridad a esta población vulnerable con “Este espacio es mío”. Con la Encuesta de Victimización tenemos insumos para un programa de Desarrollo Productivo junto a la Secretaría de Comercio para otorgar créditos, la creación de una escuela y un circuito para jóvenes emprendedores que ya estén trabajando, enseñándoles herramientas para el ahorro, la inversión, usar los dos primeros años para producción”. Los talleres de herrería, construcción y mecánica automotriz de la Pandilla Ros son uno de los proyectos que se adelantan.

Paralelamente se impulsará la reforma de la Ley de Juventud del estado Aragua a la que Perdomo considera “sin sustancia, por la que hace reformarla acorde a las nuevas circunstancias, el Plan de la Patria y la Ley Nacional de Juventud” mientras para abril se planea abrir la escuela de liderazgo con la profesora Nelitza Solarte.

Paz Activa propone ley para alejar a jóvenes de la delincuencia

Publicado el Miércoles, 5/February/2014
El sociólogo Luis Cedeño, director ejecutivo de la organización no gubernamental Paz Activa, explica el modo en que Colombia logró reducir sus índices de violencia y criminalidad al implementar planes prácticos de control ciudadano. "Uno de los elementos fundamentales fue el control social a través de la cultura de la obediencia". Explicó que en esta experiencia, si un ciudadano veía a otro cometiendo una falta lo rechazaba a través de un símbolo y no de la confrontación directa, evitando así actos violentos.
Luis Cedeño
""Eso fue un control cultural que se dio y que luego generó una cultura ciudadana de la obediencia de las leyes y disposiciones", dijo en entrevista para El Diario de Caracas.
La organización propone un plan dirigido a jóvenes en riesgo de asumir la carrera delincuencial de entre 9 y 11 años.
"Rescatar a esos jóvenes y darles las mejores oportunidades que pueda dar el Estado venezolano. Cuando él es extraído del modelaje del malandro, de lo que se creía que era bueno, tiene una gran oportunidad para no ser emprendedores delictivos sino sociales y económicos", explicó.
La implementación de este programa disminuirá las tasas de homicidio en un plazo de 5 a 6 años.
Para ver la noticia completa, haga click al siguiente link http://ow.ly/tQ6rw 









Sociólogo: En Venezuela "las personas pueden delinquir sin ningún tipo de consecuencias"

10 / 01 / 2014
- 04:24:47

El sociólogo y Director de Paz Activa, Luis Cedeño, asegura que se debe establecer una agenda de trabajo a mediano y largo plazo, que fije indicadores y metas claras en el tema de la seguridad ciudadana para los próximos 5 años. 

Según Cedeño, ha sido difícil medir la efectividad de las políticas públicas en el tema de seguridad por la falta de acceso a la información, tanto de periodistas y de organizaciones, que buscan tomar el pulso a esta problemática. Por ello, es difícil saber si las políticas públicas que lleva el Ejecutivo son efectivas o no. 

Cedeño comenta que hace años, con los casos como el asesinato de los hermanos Faddoul y su chofer y la masacre de los universitarios en Kennedy, hubo una reforma policial que trajo consigo, entre otras cosas, la creación de la Policía Nacional Bolivariana (PNB). 

Impunidad 

Ante el reciente crimen de la ex reina de belleza Mónica Spear, y el hecho de que uno de los asesinos estuvo preso anteriormente y salio libre de manera sencilla, Cedeño afirma que la impunidad es uno de los factores que más contribuye a que la violencia se haya vuelto un lugar común, “las personas pueden delinquir sin ningún tipo de consecuencias”. 

También, Cedeño aclara que “no hay tantos homicidas como homicidios, sino que las mismas personas repiten este delito sin que los castigue la ley”. Por ende, cada vez son más violentos, ya que nadie les pone un corto a su acción violenta. 

El sociólogo recomienda la revisión del sistema de justicia venezolano y la eficacia de éste al procesar delincuentes violentos como los de Mónica Spear. 

Ley desarme 

Para Cedeño, uno de los grandes problemas a nivel legislativo en el país es que hay graves fallas en la operacionalización de leyes que se promulgan. 

“Hubo una ley de desarme en 2002 y esa ley, lamentablemente, no pudo recoger una sola arma porque el Ejecutivo nunca dictó el único reglamento necesario para activar esa ley de política publica”, recuerda Cedeño. 

“La ley está presente, el Código Orgánico Procesal Penal está vigente, pero el sistema de justicia, los tribunales, no tienen la capacidad de responder a la creciente demanda de la criminalidad en Venezuela”. 

Cedeño asegura que hay una brecha entre los servicios de seguridad que se ofrecen y el volumen de criminalidad que se comete 

Ciudadano común 

Cedeño resata que el ciudadano común debe activarse alrededor de los casos que tienen más cercanos, ya que son pocos los venezolanos que no conocen a alguien que ha sido víctima de algún delito o de un secuestro. 

“Se debe hacer una inversión extraordinaria desde los municipios, estados y Gobierno Nacional para fortalecer todos los sistemas de prevención, administrativos, judiciales y penales, para que el sistema funcione para que los índices de inseguridad disminuyan ahorita y con el paso de los años”, analiza Luis Cedeño.

Huérfanos por la violencia no cuentan con asistencia del Estado

A menudo las niñas obtienen mejores calificaciones que los niños / BBC Mundo

“Cuando los niños preguntan, se les dice que sus papás están trabajando con Jehová en el cielo, que de allá los miran y los bendicen. Hay que salir adelante por ellos, hay que levantarlos” María Elena Delgado / BBC Mundo

Expertos señalan que es necesario ofrecer atención especializada para evitar sentimientos de rencor, que llevan a los familiares a cometer otros asesinatos por venganza

LISSETTE CARDONA

13 DE ENERO 2014 - 12:06 AM

El pasado miércoles el gobierno central anunció la creación de una Oficina de Atención a las Víctimas, que trabajará con los familiares de quienes sufren pérdidas por homicidio. No es la primera vez que se plantea la creación de una dependencia encargada de brindar apoyo a los dolientes de los asesinados.
En 2012 se informó de la creación del Sistema Nacional de Atención a Víctimas, que articularía a jueces, defensores del pueblo y fiscales. Se dijo que se organizaría un Registro Nacional de Víctimas y un sistema de asignaciones dinerarias para sobrevivientes de la violencia grave para indemnizaciones que no se concretaron. Pese a la intención de fundar un organismo que se ocupe de las víctimas de la violencia, la falta de una dependencia especializada en los huérfanos persiste.
El sociólogo Roberto Briceño León, director del Observatorio Venezolano de Violencia, indicó que el Estado venezolano no cuenta con una política de atención a los niños huérfanos por la violencia, el apoyo se ofrece de manera generalizada y llega de manera tardía. La desatención específica de los hijos de asesinados forma parte de un círculo vicioso.
“La orfandad siempre es dura y cuando es producto de una acción humana, por asesinato, hay una atribución de culpabilidad en otro que puede generar sentimientos de venganza. Estos niños no tienen quien se ocupe de ellos”, aseguró.
Luis Cedeño, sociólogo del Instituto de Investigaciones de Convivencia y Seguridad Ciudadana y presidente de Paz Activa, señaló que las personas que pierden a un familiar pocas veces obtienen apoyo posterior al suceso.
“Nos ocupamos de atrapar al victimario, pero no de las víctimas. Hay un dolor humano y psicológico que atender. No hay asistencia del Estado o no es expedita. Normalmente el hombre que es víctima de homicidio deja un problema porque es el sustento del hogar. Pero en Venezuela la familia es mayormente matriarcal. Es mucho más grave cuando se pierde a la madre porque hay un patrón de revictimización. Ella era quien inculcaba los valores, y cuando falta ese niño se pude convertir en victimario”, expresó.
Hace un año, la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad habilitó el Servicio de Atención Integral a Víctimas de Violencia para brindar acompañamiento a las víctimas, pero solo se ofrece a habitantes de la parroquia Sucre en Caracas, es decir, a un número limitado de afectados. Las llamadas formuladas al Saivv por el 0212-802-8800, el pasado viernes 10 de enero, no fueron atendidas. El tono al otro lado del teléfono indicaba que la línea estaba ocupada y así permaneció toda la tarde.
Solas
A los tres hijos de María Elena Delgado los mataron. Su nieto, de 20 años de edad, también fue asesinado. Las muertes obligaron a la mujer a apoyar a sus nueras en la crianza de tres niños, de 3, 5 y 6 años de edad. Todo ocurrió entre 1999 y 2008. Ninguna de las mujeres, que comparten la misma casa, ha recibido apoyo para superar las pérdidas.
“El miedo lo sentí cuando perdí a mis hijos, pero igual me fui contra todo. Perseguía a los malandros y le avisaba a los policías. Me fui calmando, pero después me encerré por ocho meses. Me costó mucho, pero salí adelante. A esos tres niños hay que levantarlos. Por eso tuvimos que ponernos a trabajar”, relató.
Delgado, que vive en Petare, contó que cada vez que los pequeños preguntan por sus papás le dice que están en el cielo.
“El mayor hizo el regalo del Día del Padre en la escuela y no tenía a quien dárselo. No se le había dicho nada hasta ese momento. Le tuvimos que decir lo que pasó. Lloró mucho, pero después el regalo me lo dio a mí”, narró.
El número de huérfanos por la violencia en Venezuela es desconocido. Cientos de niños como los nietos de María Elena Delgado han quedado sin padre, sin madre o sin ambos, en hechos delictivos.

Víctimas secundarias

El Informe sobre la Situación de Violencia en el Área Metropolitana de Caracas de 2011 del Cabildo Metropolitano de Caracas señala que la falta de estadísticas sobre los homicidios incide en el desconocimiento del número de víctimas secundarias.
“En Venezuela, el duelo traumático por victimización secundaria por delitos violentos es sufrido por más de medio millón de personas durante los últimos 10 años, y no existe ningún tipo de política de apoyo para esas mujeres y su familia, particularmente las niñas y los niños que quedan huérfanos o pierden a sus hermanos y otros familiares significativos producto del homicidio con armas de fuego”, dice el texto.
De acuerdo con los reportes de muertes publicados por El Nacional, cerca de 28 niños quedaron huérfanos en diciembre de 2013. En lo que va de 2014, otros 5 chiquillos corrieron con la misma suerte, entre ellos, la hija de la actriz Mónica Spear. La cifra es un subregistro. Solo cuenta los casos reportados por los periodistas.

LAS CIFRAS

28 niños quedaron huérfanos en diciembre de 2013 por causa de homicidio. 2 de ellos presenciaron el asesinato de sus padres
5 niños quedaron huérfanos entre el 1° y el 10 de enero de 2014. Solo la hija de Mónica Spear vio el homicidio de sus papás
24.763 muertes violentas se registraron en 2013. La mayor parte de los homicidios, equivalentes a 53%, fue contra hombres

12% del total de muertes que se registran en Venezuela anualmente se produce luego de un hecho delictivo o situación de violencia